Perdona, muerte, si me río,
mas no lo puedo evitar,
creíste que al cubrirla con tu manto frío,
la dejaría de amar.
mas no lo puedo evitar,
creíste que al cubrirla con tu manto frío,
la dejaría de amar.
Perdona, muerte, si me río
pero... no puedo parar,
creíste que la sepultaría bajo el olvido,
mas no la puedo olvidar.
pero... no puedo parar,
creíste que la sepultaría bajo el olvido,
mas no la puedo olvidar.
Ya ves, muerte, cómo me río,
no lo puedes evitar,
reconoce que has perdido,
pues tarde o temprano vendrás por mí,
tú nos separaste, tú nos volverás a juntar.
no lo puedes evitar,
reconoce que has perdido,
pues tarde o temprano vendrás por mí,
tú nos separaste, tú nos volverás a juntar.
Perdona, muerte, si me río,
mas… no puedo parar.
mas… no puedo parar.
"Mírame" © Francisco González García. 2005.
Muy de nivel de ESO, ¿no? La poesía, en adultos, debería ser otra cosa.
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